PLANIFICACIÓN DE OBJETIVOS DE LA TEMPORADA

Si observamos detalladamente el listado propuesto de objetivos y su distribución , veremos que raramente el mismo objetivo se repite en más de una ocasión.

Nos encontramos por lo tanto con dos consideraciones:

  • El entrenador y en consecuencia el jugador durante la temporada, experimentará de forma específica en una única sesión cada uno de los objetivos propuestos.
  • Evidentemente esta disyuntiva plantea la necesidad de más repeticiones para que el jugador adquiera unos mínimos aceptables del objetivo, que le permita adquirir una base solida de su aprendizaje.

Esta situación viene producida por:

  • La necesidad de que el jugador conozca y reconozca cada uno de los objetivos propuestos, es decir ninguno de ellos es prescindible en relación a la etapa correspondiente, es cierto sin embargo que unos lo son más que otros.
  • El poco tiempo del que se dispone en un proceso formativo de la complejidad del fútbol

Tendremos en cuenta, sin embargo:

  • Que la metodología desarrollada permite que el jugador en cada una de las actividades, mayoritariamente, desarrolle sea cual sea el objetivo planteado todos los objetivos con más o menos incidencia, es decir, que en cada sesión de entrenamiento el entrenador si lo considera oportuno puede corregir u orientar sobre un aspecto concreto, aun no siendo el objetivo previsto en la actividad.
  • Que los mismos objetivos serán desarrollados en cada una de las distintas etapas formativas del jugador, evidentemente con planteamientos, sub-objetivos o perspectivas diferentes. Pero consiguiendo su mejora progresiva sin ningún tipo de duda.

Aun así, el entrenador si lo considera oportuno puede:

  • Insistir en sesiones posteriores, aunque planteen otros objetivos, sobre el mismo trabajo (con algún nivel de dificultad distinto -de los 3 propuestos-), en detrimento de otros objetivos que considere menos relevantes.