Texto extraído y recomendada su lectura de: Sans Torrelles, Alex, Frattarola Alcaraz, Cesar. 2014. Volumen 1.1: El Juego Colectivo. MCSports. |
ESTILOS DE JUEGO OFENSIVO
El juego a desarrollar por un equipo viene determinado por los estilos de juego ofensivo y defensivo que utiliza.
- Estilo en corto/de control, ASOCIATIVO/POSICIONAL: Se caracteriza porque manifiesta:
- Juego mayoritariamente raso.
- Toques/pases cortos (15-20 m).
- Juego rápido (un toque técnico o dos “toques tácticos”).
- Apoyo constante al poseedor del balón.
- Equilibrio y relación en y entre líneas.
- Triangulaciones.
- Salidas de zona (para crear superioridad numérica y/o aprovechar espacios libres).
- Las tres fases del juego ofensivo (inicio, progresión y finalización).
Entendemos que el estilo de juego en corto es el más adecuado para un proceso de formación correcto, a pesar de las dificultades que comporta.
Hasta que no se consigue un buen dominio y precisión de los aspectos propios del juego en corto no empiezan a obtenerse buenos resultados (aspecto que condiciona las actitudes del entorno -padres <en el caso del fútbol base>-, directivos, los propios jugadores, etc.).
El estilo de juego en corto es el único que permite aumentar la eficacia/rendimiento de nuestro juego ofensivo y defensivo al mejorar el control del juego y del balón, y por tanto el único que justifica un trabajo con objetivos de mejora constante (tanto en un proceso formativo como en el de máximo rendimiento).
- Estilo en largo/de profundidad/DIRECTO: Se caracteriza porque manifiesta:
- Desplazamientos largos del balón.
- Búsqueda directa de la zona de finalización.
- Inicio del juego ofensivo sacando directamente de portería o del portero en largo.
- Acciones de ataque muy rápidas, realizadas en pocos toques y con un gran sentido de la profundidad, finalicen en remate o no.
Se justifica su utilización para realizarlo ante defensas colectivas de presión adelantada.
- Estilo con Cambios de orientación y de ritmo “De CORTO para LARGO”: Se caracteriza porque manifiesta:
- Aspectos característicos de los estilos de juego en corto y en largo, combinando las acciones cortas con desplazamientos largos, “controlados”, para aprovechar los espacios libres creados en las zonas opuestas a la ubicación del balón.
- Estilo de juego A “MEDIOS”:
- Cuando la presión del contrario en nuestra sub-fase de Inicio la realiza con marcajes individuales a nuestra línea defensiva, probablemente nuestra línea de medios dispondrá de superioridad numérica lo que permite al portero lanzar un balón al jugador libre de esta línea.
ESTILOS DE JUEGO DEFENSIVO
Para establecer las características del estilo de juego defensivo realizaremos un breve análisis de los tres grandes tipos de marcaje:
- “Eliminar” al jugador contrario –situaciones de 1:1 – (marcaje individual).
- Marcaje al hombre.
- Su objetivo principal es “eliminar” el juego del jugador adversario.
- Es el estilo defensivo más simple, aunque implica un desgaste físico y psicológico enorme.
- Requiere jugadores de características muy específicas.
- Presenta riesgos muy elevados en el caso de que un defensor sea desbordado. Por este motivo propicia la realización de numerosas faltas (con el peligro que las estrategias comportan en el fútbol actual), y la necesidad de conseguir superioridad numérica en la zona del poseedor.
- Resulta poco efectivo para realizar una rápida y eficaz transición defensa/ataque, debido a la desubicación ofensiva en la que se encontraran los jugadores al recupera el balón.
- Imposibilitar las evoluciones del balón - Presión sobre el balón (presión colectiva).
- Marcaje de presión en la zona sobre el balón.
- Su objetivo principal es imposibilitar las evoluciones del balón en la zona próxima (eliminación de espacios).
- Es de fácil superación mediante cambios de orientación (directos o indirectos), incluso cuando el contrario ha basculado de manera intensa, ya que a partir del segundo o tercer cambio de orientación es prácticamente imposible que se llegue a la posición del balón para ejercer la presión.
- “Eliminar” espacios de juego (marcaje zonal).
- Marcaje por zonas.
- Su principal objetivo es eliminar el espacio de juego.
- La existencia de una superficie de 2700-3000 m2. útiles para desarrollar el juego de ataque del contrario hace muy difícil, por no decir imposible, eliminar completamente los espacios de juego existentes para el contrario.
A pesar de todo ello parece ser el estilo de juego defensivo más adecuado para contrarrestar a un equipo de alto nivel de juego, ya que ofrece diversos aspectos que parecen especialmente eficaces. Aun así debemos tener en cuenta los siguientes puntos:
- El defensor que se encuentra en la zona del poseedor adversario debe evitar su progresión, realizando un marcaje definido/presionante.
- Evitar en la zona del balón una situación de 1:2 (situación de inferioridad numérica).
- Crear presión, eliminar espacios libres y provocar situaciones de superioridad numérica (2:1) en nuestra zona defensiva cuando el balón se encuentra en ella. -- Orientación del equipo defensor, en la zona de progresión, mediante una basculación hacia el carril/zona en la que se encuentra el balón, de manera que se puedan eliminar espacios de juego y realizar grandes coberturas. Se debe manifestar una vigilancia en diagonal en las zonas opuestas para contrarrestar posibles cambios de orientación realizados por el equipo adversario.
- El resto de jugadores se mantienen en sus respectivas zonas, cerca de sus contrarios (sin realizar un marcaje individual) eliminando la LINEA DE PASE entre su adversario i el balón (conseguir “LINEA de INTERCEPTACIÓN”).
Entendemos como línea de interceptación la existente entre el balón y el adversario atacante que está en nuestra zona con opciones de recibir. El defensor no debe marcar al jugador, ni eliminar los espacios del poseedor, sino que su misión es “cortar” la línea de pase sin salir de su zona de juego.
De esta manera, y sin necesidad de salir de la propia zona defensiva, los jugadores pueden evitar que el contrario se encuentre en situación de recibir el balón, posicionándose de manera que puedan “cortar” la línea de pase.
De este modo no será necesario ni un marcaje intenso sobre el contrario, ni una acumulación de jugadores en la zona del balón.
Denominamos a estas variantes y formas defensivas “MARCAJE INTELIGENTE”.
En consecuencia con lo comentado en este punto, entendemos que únicamente podremos conseguir el éxito defensivo (evitar la finalización del contrario/recuperar el balón), si aprovechamos sus errores ofensivos.
ATAQUE POSICIONAL
Es una manifestación del estilo de juego en corto que se caracteriza por el hecho de que los jugadores (durante las sub-fases de inicio y progresión) se limitan a jugar dentro de su demarcación, gracias a su alto nivel individual que garantiza que no se perderá el balón en situaciones de 1:1 con probable desborde del contrario con un regate. Realizando un cambio de orientación al compañero que se encuentra sólo en su demarcación cuando el contrario sitúe a más de un jugador en la demarcación del poseedor.
Se caracteriza por:
- Pases cortos (15-20 m). - 20 metros es el espacio máximo de recorrido del balón que no permite al contrario disponer del tiempo necesario para interceptarlo. - 15 metros es el espacio mínimo que no permite que un solo contrario pueda anular el espacio de juego de dos jugadores (el del poseedor y el del jugador que le apoya).
- Constantes apoyos /cambios de orientación colectivos directos o indirectos.
- El control del balón y del juego, manifestando las tres sub-fases ofensivas:
- Inicio
- Progresión
- Finalización.
CONTRAATAQUE y ATAQUE RÁPIDO
Contraataque:
Acción colectiva que se realiza cuando el equipo que defiende recupera el balón (transición D/A), controlándolo en la zona de Inicio/Progresión, de manera que se llegue a la zona de finalización en conducción o mediante pases cortos (balones controlados), antes que el adversario organice su juego defensivo.
Ataque rápido.
Acción colectiva que se realiza cuando el equipo que defiende recupera el balón (transición D/A), controlándolo en la zona de inicio, y jugándolo de forma directa y en profundidad a un compañero rápido, mediante un diseño estratégico, de manera que se llegue a la zona de finalización antes que el adversario organice su juego defensivo.
ANÁLISIS DEL JUEGO MEDIANTE LAS UNIDADES DE COMPETICIÓN (UC)
En los análisis habituales de un partido se manifiestan VALORACIONES GENERALES.
Estas valoraciones pueden diferir mucho entre cada uno de nosotros (“cada maestrillo tiene su librillo”/Aspectos que resultan transcendentales para un entrenador, otros no los han tenido ni en cuenta).
La extrema complejidad que presentan las acciones y los cambios constantes y inmediatos que se producen durante un partido, impiden la realización de un análisis objetivo de forma global, por lo que necesitamos parcializar el partido en “fragmentos más pequeños” que permitan ser analizados detalladamente (Unidades de Competición).
Una Unidad de Competición (UC) es el espacio de tiempo que transcurre entre que un equipo recupera la posesión del balón (lo controla), la pierde y la vuelve a recuperar (controlar).
Entendemos que un equipo controla el balón cuando el jugador que lo recuperar lo manipula al menos con 3 toques o lo pasa de forma eficaz a un compañero (tiempo o acción que permite al “recuperador” gestionar de forma eficaz el control/posesión del balón).
En un partido se producen aproximadamente unas 80-100 UC, que dependen en gran medida de diferentes aspectos, como pueden ser la calidad de los equipos, las formas y el estilo de juego que utilicen, la intensidad con la que juegan, etc.
El hecho de sistematizar y objetivar el nivel de juego del equipo a través de las UC permitirá, posteriormente, determinar cuáles son las causas que han provocado los errores, y proceder a corregirlas mediante el entrenamiento.
Por esta razón resulta básico conocer que el juego de un equipo se analiza mediante las UNIDADES de COMPETICIÓN, ya que a pesar de que todas presentan los mismos objetivos (finalizar y recuperar), en cada una de ellas aparecen diferentes manifestaciones que las distinguen y diferencian.
La UC está formada por dos fases:
- La fase Ofensiva.
- La Fase Defensiva.
LA FASE OFENSIVA DE LA UC
- Se inicia cuando el equipo recupera el balón.
- Finaliza cuando se remata a portería o cuando se pierde la posesión del balón.
Tiene como objetivo que la UC finalice con un remate a portería (marcar o no el gol, no lo podemos considerar/valorar como objetivo colectivo, ya que esto dependerá finalmente de los aspectos de eficacia técnica del poseedor, o del acierto del portero adversario).
En esta fase se manifiestan (en el estilo de juego en corto) 3 SUBFASES:
- Inicio.
- Progresión.
- Finalización.
SUBFASES DE LA FASE OFENSIVA PARA EL ESTILO DE JUEGO EN CORTO (ASOCIATIVO/POSICIONAL)
La sub-fase ofensiva de INICIO
- Objetivo: Hacer llegar el balón controlado a la zona de Progresión en posesión de un compañero orientado hacia la portería contraria, con claras opciones de que llegue a la zona de finalización de manera controlada en menos de 4/5 toques.
- Características
- Existe superioridad numérica en relación a la línea de ataque contraria.
- Se deben realizar cambios de orientación directos o indirectos hasta que se manifieste la oportunidad de conseguir el objetivo.
- Deberemos enlazar y deben participar en esta fase, la línea de medios y/o de ataque mediante triangulaciones y/o cambios de ritmo en el Juego Colectivo.
La sub-fase ofensiva de PROGRESIÓN
- Objetivo: Hacer llegar el balón a la zona de finalización en menos de 4/5 toques, y con opciones de poder realizar el centro/remate.
- Características:
- La zona de progresión presenta grandes espacios que se deben aprovechar para progresar sin perder la posesión del balón. Parece lógico pensar que cuatro medios del equipo defensor no pueden cubrir todo el ancho del campo (aproximadamente 60 metros) con posibilidades reales de evitar el control y la progresión de un equipo bien estructurado.
- Una vez el balón está en fase de progresión se debe alcanzar la zona de finalización en menos de 4/5 toques. Si no se consigue se debe reorientar el juego inmediatamente con un cambio de orientación directo o indirecto.
Se trata de no dar tiempo al contrario (relacionamos los “toques” con el “tiempo” de manipulación del balón, de forma que sea más comprensible para el jugador) con una “larga” posesión del balón en una determinada zona, ya que le permitiría anular los espacios de juego. Este tiempo/toques pueden disminuirse o ampliarse en relación a la calidad técnica del poseedor (a más calidad más tiempo de posesión con garantías de no perdida), la mayor basculación colectiva del contrario permitiría manifestar más espacio (eficacia) para el compañero receptor de la otra zona /carril. Si la calidad es menor el tiempo de posesión en la misma zona /demarcación debe ser menor para evitar la pérdida que provocaría esta reducción de espacios.
La sub-fase ofensiva de FINALIZACIÓN
- Objetivo: Conseguir el centro y el posterior remate a portería.
- Características:
- Ausencia de espacios y de tiempo (a excepción de una acción de contraataque) por la manifiesta superioridad numérica del adversario.
- Las dimensiones de la portería y que esta esté defendida por un especialista aumenta las dificultades.
- Priorizar la rapidez sobre la precisión
- El juego debe desarrollarse a una gran velocidad, casi como una estrategia con movimientos y acciones previstos.
- Diferenciar los movimientos y acciones en la entrada a zona de finalización por los extremos o por el centro.
FASE DEFENSIVA
- Se inicia cuando el equipo pierde la posesión del balón.
- Finaliza cuando la vuelve a recuperar.
Entendemos que un equipo recupera el balón cuando lo controla realizando, como mínimo, 3 o 4 toques, sin perderlo o realiza/se asocia con un pase a un compañero.
En esta fase se manifiestan en 4 SUB-FASES:
- Subfase 1.
- Subfase-2.
- Subfase 3.
- Subfase 4.
SUBFASES DE LA FASE DEFENSIVA
Para valorar el éxito o el fracaso de la fase defensiva de nuestro equipo debemos tomar como referencia, en primer lugar, su objetivo:
- Recuperar el balón antes que sea rematado.
Debemos tener en cuenta que ante un juego ofensivo perfecto -más que improbable en estos momentos- evitar la finalización del adversario (su éxito en las sub-fases de iniciación y progresión) resultaría casi imposible.
Por tanto la acción defensiva se basará en aprovechar los errores cometidos por el contrario).
- Si fracasamos en este objetivo debemos analizar las diferentes situaciones de juego que se han manifestado durante esta fase, y detectar los errores cometidos.
Para valorar estos errores es necesario previamente tener determinados los objetivos específicos de cada línea y de cada demarcación para cada una de las 4 sub-fases defensivas que se manifiestan en cada UC, y que sólo se pueden establecer utilizando en ataque el estilo de juego de control/posicional.
La concreción del trabajo a realizar dependerá en gran medida (además de las características propias de nuestra “forma de juego” (Sistema, Estilo, características del nuestros jugadores,...) de los diferentes aspectos que plantee en su fase ofensiva el contrario:
- El sistema de juego utilizado.
- El número de jugadores en cada línea, con relación a nuestras líneas en defensa (estructura).
- Su estilo de juego:
- De control (asociativo/posicional).
- En largo/directo.
- De corto para largo.…
- Su nivel técnico individual y colectivo.
El entrenador (teniendo en cuenta estos aspectos del contrario) deberá determinar los objetivos y las formas defensivas por líneas y por demarcaciones para cada una de las 4 sub-fases del juego defensivo:
- En las Sub-fases 1, 2, 3: Objetivo recuperar el balón.
- En la sub-fase 4: Evitar el remate.
- De esta manera, si nuestras formas defensivas (del equipo, de cada línea y de cada demarcación) en cada sub-fase son adecuadas y se ejecutan correctamente, deben provocar el éxito en relación a los objetivos previstos (para el equipo, para cada línea y para cada demarcación).
- Si el diseño de las formas objetivadas establecidas son coherentes y permiten el éxito defensivo, podemos valorar objetivamente.
- El éxito de cada una de las Sub-Fases del juego defensivo analizadas.
Este éxito vendrá provocado por la correcta realización (decisión colectiva -fundamentos-/estructura diseñada y/o ejecución: aspectos tácticos) de las acciones defensivas en relación con los objetivos defensivos (del equipo, de cada línea y de cada demarcación -evitar el juego eficaz del contrario, recuperar el balón, y/o evitar en último caso el remate del contrario-).
El fracaso en las sub-fases del juego defensivo analizadas:
Este análisis nos permitirá detectar los errores (diseño, decisión y/o ejecución) que se puedan haber cometido en cada una de las acciones defensivas en relación a los objetivos defensivos (del equipo, de cada línea y de cada demarcación -evitar el juego eficaz del contrario, recuperar el balón, y/o evitar en último caso el remate del contrario-).
Ejemplos:
- Si recuperamos el balón en la sub-fase 4, analizaremos los errores cometidos en las sub-fase 0, 1, 2 y 3 (que son los que habrán permitido el control, del balón por parte del contrario en cada una de ellas).
- Si el contrario consigue finalizar (remate/centro), analizaremos los errores cometidos en la sub-fase 4, además del resto.
Subfase 0 defensiva:
Nuestro equipo se encuentra en su fase ofensiva (en tareas atacantes).
Los jugadores que no están en la orientación del juego y/o no intervienen directa o indirectamente en el juego ofensivo, estarán más cerrados y atrasados en relación a su línea.
Estos jugadores deberán manifestar una intención/orientación de vigilancia defensiva para poder intervenir con ventaja ante una pérdida de nuestro equipo, tal como establecen los fundamentos:
- Los jugadores de la LD en ningún caso jugaran por delante del balón.
- Los jugadores de la LM nunca esperaran el balón por delante de su línea.
Si respetamos estos aspectos (establecidos en los FUNDAMENTOS/CONSIGNAS del Juego Colectivo en ataque), en caso de pérdida del balón estos jugadores podrán intervenir con ventaja en relación al ataque rápido o al contraataque que pueda iniciar el contrario al recuperar el balón, y siempre llegarán a nuestra zona defensiva antes que los contrarios de sus líneas.
De esta manera evitaríamos, en la transición ataque/defensa, que el contrario pudiera aprovechar nuestro desequilibrio defensivo.
Subfase -1- defensiva
Ejemplo de los posibles objetivos a proponer para nuestro equipo, en el supuesto de que juguemos con el sistema P.4.4.2:
SUBFASE -1- | Nuestro equipo pierde la posesión del balón, en nuestra zona de progresión, mediante un robo del contrario, estando el balón en juego. |
Equipo |
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Línea que pierde el balón |
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Línea de ataque |
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Línea defensiva |
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SUBFASE -2- | El equipo opositor controla el balón en su campo. |
Equipo |
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Línea de Ataque |
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Línea de medios |
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Línea defensiva |
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SUBFASE -3- | El equipo opositor controla el balón en nuestro campo. |
Equipo |
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Línea de ataque |
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Línea de medios |
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Línea defensiva |
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SUBFASE -4- | El equipo opositor controla el balón de manera eficaz dentro de nuestra zona defensiva. |
Equipo |
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Línea de ataque |
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Línea de medios |
|
Línea defensiva |
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Podemos ampliar hasta el mínimo detalle cada uno de los aspectos mencionados (tanto a nivel individual como colectivo, mencionando los aspectos decisionales y/o los de ejecución...).
Lo expuesto aquí es únicamente un ejemplo del planteamiento que se debe establecer en nuestra organización defensiva.
LAS SITUACIONES DE JUEGO
Durante las Fases Ofensivas y Defensivas de una Unidad de Competición el balón se posiciona en diferentes zonas del campo. De estos desplazamientos resultan diferentes SITUACIONES DE JUEGO con diferentes planteamientos colectivos.
Las situaciones de juego son situaciones específicas del fútbol, que se manifiestan de manera habitual en un espacio y momento determinados, siempre que el equipo manifieste de forma correcta la ESTRUCTURA BÁSICA EN ATAQUE y en DEFENSA.
Factores que definen las situaciones de juego:
- La zona/demarcación de juego en la que se encuentra y se controla el balón. Determinamos:
- 3 carriles de juego:
- Derecho.
- Central.
- Izquierdo.
- 3 zonas propias de juego:
- Inicio.
- Progresión (Está dividida en dos sub-zonas –A y B-).
- Finalización.
- Configuración de cada demarcación –según el sistema de juego-:
- 1 jugador.
- Más de uno.
- Sin jugadores.
- 3 carriles de juego:
- Qué jugador manipula el balón (el propio de la zona u otro que la ha ocupado).
- La orientación que el poseedor le da al balón/juego.
- De dónde y cómo ha llegado el balón a esta demarcación.
En ataque (fase ofensiva):
En cada Situación de Juego debemos conseguir:
- No perder la posesión del balón, y/o
- Progresar hasta alcanzar la zona de finalización con opciones de que se produzca el remate.
En cada SJ las posiciones y desplazamientos de los jugadores que no tienen el balón y están en la Orientación del Juego, deben permitir al poseedor (apareciendo en el espacio y consiguiendo una superioridad numérica -2:1-) al menos 4 opciones:
- Progresar (conducción-regate/pared con espacio de salida).
- Pasar en profundidad (vertical/diagonal).
- Realizar un cambio de orientación (pase horizontal).
- Jugar en seguridad (pase atrasado).
En defensa (fase defensiva):
En cada Situación de Juego QUE MANIFIESTE EL CONTRARIO debemos establecer los objetivos a desarrollar en relación a:
- La transición ataque defensa.
- La Sub-fase a la que corresponde la situación de juego.
- El trabajo a realizar en cada una de ellas.
- Los aspectos colectivos establecidos en la ESTRUCTURA DEFENSIVA diseñada.
- Los aspectos de ejecución a desarrollar por cada jugador en relación a “su contrario”.
- Las formas de cobertura/ayudas en superioridad numérica y/o permutas a realizar.
Veamos los elementos que debemos tener en cuenta tanto para el entrenamiento como para el análisis de la competición.
Determinamos como objetivo único-final de cada fase ofensiva:
- FINALIZAR (Centrar y/o rematar).
Determinamos como final de cada fase defensiva:
- RECUPERAR el balón antes de que el contrario consiga finalizar.
LA TRANSICIÓN DEFENSA-ATAQUE
Acción compuesta por evoluciones individuales y/o colectivas, que se realizan en un breve espacio de tiempo de manera habitualmente imprevista (a pesar de que se deben establecer y prever las acciones de forma estratégica) cuando el equipo que defiende recupera el balón, manteniéndose éste en juego.
El objetivo prioritario es conseguir el control del balón para:
- Realizar un ataque rápido.
- Realizar un contraataque.
- Iniciar un ataque de control (posicional/asociativo).
La acción inmediata que debe realizar el jugador que recupera el balón estará relacionada con:
- La zona en la que se recupera (podemos y debemos establecer unas determinadas zonas de recuperación de forma que podamos diseñar y entrenar las opciones/acciones que nos permitirán conseguir el objetivo previsto).
- Los espacios que se manifiesten entre él y la portería contraria, cantidad de contrarios.
- El/los apoyo/s que reciba de los compañeros en D.O. o de los que se encuentren más atrasados y libre de marcaje.
Si el jugador que la recupera NO puede iniciar directamente un ataque rápido o un contraataque podrá asegurar el balón jugándolo al compañero libre que esté fuera de la zona de recuperación (de forma directa o indirecta), pudiendo entonces iniciar un ataque de control (posicional/asociativo).
LA TRANSICIÓN ATAQUE-DEFENSA
Acción compuesta por evoluciones individuales y/o colectivas que se realizan en un breve espacio de tiempo, de manera habitualmente imprevista (a pesar de que se deben establecer y prever las acciones de forma estratégica) cuando el equipo que ataca pierde el balón, que continua estando en juego pero controlado por un jugador adversario.
En este caso trabajaremos lo expuesto en la sub-fase defensiva -1- para evitar el control eficaz del balón por parte del contrario, un ataque rápido o un contraataque, y en el mejor de los casos recuperar el balón.
Si el balón se pierde durante el juego en nuestra zona de inicio, la disposición de los jugadores que no están en la orientación del juego –subfase 0- (y la de los que realizan el apoyo de emergencia) deben solucionar el problema evitando el juego rápido y eficaz del contrario (presión intensa, repliegue hacia nuestra portería, falta táctica,...).
Si el balón se pierde en un saque directo de portero o de portería, será lo que esté previsto en la estrategia lo que nos permitirá neutralizar la situación y la posterior recuperación del balón.
ZONAS de JUEGO
Espacio de juego determinado (entre 300 y 400 m2.) que afecta a la posición/demarcación de juego de uno, de dos o de ningún jugador, si el sistema así lo establece.
Resulta evidente que el sitio donde se encuentra el balón afecta de manera directa tanto a la situación de juego como a la consigna que permite resolverla. Por esta razón debemos clasificar los espacios del terreno en diferentes zonas/demarcaciones de juego, para después poder concretar la consigna/Fundamento de cada una de las diferentes situaciones del juego que puedan darse.
Debemos acostumbrar al jugador a distinguir las distintas zonas relacionándolas con las líneas o círculos marcados en el campo, de esta forma, será fácil para él ubicarse en el terreno de juego.
SISTEMAS DE JUEGO
El concepto de sistema hace referencia a la disposición/ubicación de los jugadores en relación a las diferentes demarcaciones para el juego ofensivo, de manera que se ocupe, en profundidad, en amplitud y de forma eficaz el 50% del terreno de juego.
El sistema de juego utilizado implica diferentes consideraciones:
- La existencia en una demarcación de uno o dos jugadores.
- La existencia de una demarcación sin ningún jugador.
- La existencia de algún jugador que enlace dos líneas de juego.
En este aspecto debemos diferenciar cuando un jugador ocupa este espacio desde su demarcación, o cuando “es” su demarcación. En este caso el sistema sufre de una falta de espacio en relación al equilibrio entre líneas, lo que provoca que sea una variante defensiva del sistema básico.
La intención de jugar con más o menos defensas, medios o delanteros en cada línea de juego.
Esta intención no siempre guarda una relación directa con el número de jugadores que componen cada una de las líneas, ya que por ejemplo se puede introducir en la línea de medios un jugador de claras características ofensivas (o defensivas), que es lo que finalmente dará una orientación más ofensiva o defensiva al equipo.
El sistema de juego debe permitir manifestar:
- Espacios libres para aprovechar (demarcaciones sin jugadores).
- Superioridad numérica en determinadas demarcaciones.
- La relación de juego en la línea y entre las diferentes líneas.
Esta relación implica que la distancia entre jugadores/líneas se mantenga entre 15 y 20 metros; por tanto un sistema básico tendrá, como norma, 3 líneas (además del portero).
Este aspecto es importante teniendo en cuenta la regla del fuera de juego.
La estructura que permite más de tres líneas la consideramos, por tanto, una variante de un sistema básico.
Los sistemas de juego básicos en el fútbol-7 son:
- P.2.3.1
- P.3.2.1
- P.3.1.2
En cualquier caso el sistema que en mayor medida nos equilibra y permite una adaptación más rápida y lógica al Fútbol-11 es el P.2.3.1
Los sistemas de juego básicos, en la actualidad, en el fútbol-11 son:
- P.4.4.2
- P.4.3.3
- P.3.4.3
A partir de estos sistemas se pueden plantear diferentes variantes ofensivas y defensivas (como veremos posteriormente).
Estas variantes del sistema son modificaciones y/o desplazamientos de posiciones/ubicaciones específicas, y pueden obedecer a:
- Un cambio de jugadores en relación a sus características (más o menos defensivas/ofensivas).
- Una modificación del número de jugadores que componen una de las líneas de juego.
Utilizaremos una estructura u otra (sistema de juego) en relación a:
- Las características de nuestros jugadores.
- Las características del contrario.
- El tipo de juego que se manifieste en la competición en la que participamos.
- Excepcionalmente por las necesidades a conseguir en la competición.
SISTEMA P.4.4.2
SISTEMA P.4.3.3
SISTEMA: P.3.4.3
FACTORES ESPACIO Y TIEMPO
Espacio:
Entendemos como “espacio” en el ámbito del deporte y específicamente en el fútbol como aquella parte del terreno de juego (zona/demarcación) en la que desarrolla su actividad el jugador poseedor o que recibe el balón, de manera que pueda manipularlo con eficacia (mantener su posesión y progresar) sin o con una mínima oposición.
Tiempo:
Entendemos como tiempo la duración con la que se manifiesta el espacio.
Estos dos factores son el elemento básico para determinar las formas de juego óptimas, y en cualquier caso se manifiestan en el fútbol, según expone en “Fútbol. Estructura y dinámica del Juego”. Jorge F. F. Castelo (1999)”:
”... el tiempo... Está estrictamente ligado al espacio...; esto significa que son interdependientes, pues cuando más tenemos de uno más tenemos del otro.
... Esta aserción, según Cunha (1987) “tendrá pleno sentido si tenemos presente que todas las acciones realizadas colectivamente permitirán, ganando espacio, que cualquier jugador en cualquier momento tenga tiempo para jugar. Cuanto más tiempo tenga para jugar es posible un mayor margen de error por parte del jugador...
... Gréagaigne (1992) añade que... Por ejemplo, “la situación más favorable para un equipo atacante es cuando el balón y uno de sus jugadores llegan simultáneamente a un espacio libre".
“... Todavía en este contexto, Queiroz (1983) citando a Helmut Schon, refiere que <<el rendimiento de un jugador está directamente relacionado con el factor tiempo y con el factor espacio; esto es, la eficacia técnica depende de un complejo de variables técnicas y tácticas desarrolladas en el juego que pueden, o no, perturbar al jugador cuando se le presiona con el tiempo, o se le priva de espacio".
”... Según Teissie (1971) <<en juego, las acciones transcurren teniendo en cuenta el valor y la acción individual de los jugadores sobre los cuales se articula la eficacia del los sistema de fuerzas, subordinando las adaptaciones de espacio (repartición por zonas), del tiempo (momentos favorables) y de la portería…".
Como veremos, cualquier acción, situación de la táctica individual o manifestación del Juego Colectivo en ataque, están condicionadas y favorecen la aparición de estos dos factores, que son asumibles si tenemos en cuenta:
- Los grandes espacios de juego disponibles:
- 2.700 m2. Para el equipo.
- 300/400 m2. Por demarcación/zona de juego.
- La superior velocidad de desplazamiento que tiene el balón en relación a la del jugador.
- La posibilidad de efectuar desplazamientos eficaces de balón de 40-50 metros.
- La posibilidad de jugar con un alto nivel/velocidad de ejecución (1-2 toques).
- La reducción del tiempo de actuación (decisión y ejecución) por parte del jugador al aplicar los fundamentos del Juego Colectivo.
- La ocupación total y de forma coherente del terreno de juego.
JUGAR EN Y DESDE LA ZONA
Cada sistema determina, en relación a los factores espacio/tiempo y de oportunidad, unos movimientos establecidos en los Fundamentos del Juego Colectivo (tanto de ataque como de defensa) que el jugador debe dominar y realizar en función de diferentes situaciones de juego. Estos movimientos pueden ser clasificados en:
- Movimientos “cortos” a realizar dentro de la propia zona/demarcación:
- Movimientos para mantener el equilibrio en la línea.
- Movimientos para mantener el equilibrio entre líneas.
- Movimientos para “oscurecer” al adversario la visión conjunta del balón i del jugador al que marca.
- Movimientos para crear constantemente la línea de pase.
- Movimientos para estar ubicado en diagonal entre líneas.
- Movimientos “cortos” para recibir el balón con ventaja (“Pique”), etc.
- Movimientos “largos” y manifiestos (15-20 m) para salir de la propia zona/demarcación de juego:
- Movimientos parar crear superioridad numérica en la zona del poseedor (ante marcajes zonales al jugador que apoya) –creando a la vez espacios libres para ser ocupados por un compañero-.
- Movimientos para aprovechar los espacios / zonas libres creados o existentes (ante marcajes individuales al jugador que apoya), para crear S/N (2:1) con el poseedor.
- Recuperar balones “divididos”.
- Conducir/progresar.
- Permutar/desdoblar.
CAMBIOS DE ORIENTACIÓN EN EL JUEGO COLECTIVO
Los Cambios de orientación se manifiestan cuando un equipo en fase ofensiva modifica su orientación del juego/balón, hacia diferentes carriles de forma controlada (pases “asociativos”). Se pueden realizar:
- De forma DIRECTA, con pases a compañeros de la mima línea.
- De forma INDIRECTA, triangulando con compañeros de otras líneas.
- Mediante pases largos, habitualmente de un carril lateral al otro. Estos cambios son justificables cuando el poseedor no tiene ninguna posibilidad de asociarse con un compañero (ni siquiera en “seguridad) por falta de espacios.
En estos casos el contrario habrá realizado una basculación colectiva que permitirá la manifestación de grandes espacios en el carril contrario a la situación del balón.
REPLIEGUE
Son las acciones que realizan los jugadores de un equipo, cuando pierden la posesión del balón (en la 2ª, 3ª y/o 4ª sub-fase defensiva), hacia unas determinadas zonas del terreno de juego, establecidas previamente por el entrenador.
LAS CONSIGNAS DEL JUEGO COLECTIVO
Son aquellas acciones, ubicaciones/posiciones y desplazamientos, con o sin balón, detalladas como objetivos del entrenamiento en los Fundamentos del Juego Colectivo, que son consideradas las más adecuadas (ÓPTIMAS) para cada situación de juego, que cada jugador debe realizar con la finalidad de dar continuidad y eficacia al juego ofensivo o defensivo del equipo, dificultando de esta forma la respuesta defensiva u ofensiva del adversario.
Fundamento Universal Básico | LA ESTRUCTURA BÁSICA del EQUIPO en ATAQUE |
Definición: es el posicionamiento de todos los jugadores del equipo en el terreno de juego en relación a un determinado sistema. | |
Características:
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CONSIGNAS:
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TIPOS DE ERRORES MANIFESTADOS EN EL JUEGO DEFINICIÓN Y CARACTERÍSTICAS DE LOS TIPOS DE ERRORES QUE PROVOCAN LA PÉRDIDA DEL BALÓN
Siempre que exista una pérdida de balón, esta vendrá precedida de una acción técnica-táctica, a pesar de que esta acción/situación no sea siempre la causante de la pérdida.
Error de ejecución:
Es un error de ejecución cuando el error esta provocado por una acción individual técnica, táctica, física o psicológica de un jugador, con o sin balón, en relación a “su” contrario y/o al balón.
Criterios:
- Cuando en una demarcación el receptor recibe solo (es decir, con espacio libre en su zona) y se pierde el balón, obviamente el error es debido a una EJECUCIÓN técnica en la acción del pase o de la recepción.
- En el caso de un 1:1 en una demarcación podemos considerar la pérdida del balón como un error de ejecución:
- Técnica (en la recepción o en el pase).
- Táctica (en la acción previa a la recepción -línea de pase, oscurecer, …).
- Física (en la carga, velocidad,…).
- Psicológica (en la concentración, atención, miedo,…).
Por tanto en estos casos deberemos desarrollar el entrenamiento para la mejora de la ejecución de los aspectos que hayan provocado el error.
A pesar de eso, si se realizan los fundamentos de forma adecuada y en el momento oportuno esta situación errónea no se deberá manifestar, ya que el receptor lo hará en carrera y en el espacio.
Error de decisión:
Es un error decisional cuando la decisión de realizar una determinada acción técnica o táctica -tanto del poseedor como del que no tiene el balón-, o alcanzar una determinada posición que no es la correcta, originan la pérdida del balón (en 1ª, 2ª o 3 jugada), a pesar de que la ejecución esté bien realizada.
Criterio:
- Cuando en la zona de recepción del balón hay dos o más contrarios, nunca será un error de ejecución, siendo por tanto de decisión (siempre que se manifieste correctamente la estructura básica del equipo). Ello es debido a que en esta situación:
- El espacio disponible se reduce de manera ostensible, y desde una perspectiva técnico-táctica no podemos depender de la calidad excepcional de un u otro jugador para resolver la situación de juego.
- El desequilibrio que se manifiesta en la zona de nuestro receptor, implica necesariamente que en otra zona este desequilibrio se manifestará para la oposición, ya que en esta tendremos a un jugador libre de marcaje.
Por estos motivos el hecho de que el balón se encuentre en esta zona y no en la óptima se debe a un error decisional previo (2ª o 3ª jugada anterior a la situación de juego en la que se pierde el balón).
Además de lo expuesto en este apartado, podemos atender esta cuestión desde otras perspectivas:
- Las pérdidas de la posesión del balón por EJECUCIONES INCORRECTAS están relacionadas con las destrezas y/o habilidades motrices de las acciones técnicas, las acciones tácticas individuales, las físicas, o las manifestaciones psicológicas (estas dos últimas inciden especialmente en el fútbol base).
- Las pérdidas de balón por DECISIONES INCORRECTAS están relacionadas con errores en los mecanismos de percepción y/o de decisión, resultando especialmente relacionadas con las acciones colectivas:
- En este caso se ejecuta correctamente, pero una acción equivocada.
- Estas decisiones ya están concretadas en las Consignas/Fundamentos.
Por tanto los errores de decisión ya están tipificados con una corrección concreta, por lo que las pérdidas que no son de ejecución serán debidas a la NO aplicación, o a la aplicación incorrecta de una CONSIGNA/FUNDAMENTO.
En el ámbito del Máximo Rendimiento, si en las situaciones de 1:1 con espacio de salida sabemos que nuestro compañero:
- NO tiene la capacidad de mantener la posesión del balón, deberemos establecer los mecanismos para que esta situación no se manifieste. Por tanto, en este caso, podríamos considerar que se trata de un error de DECISIÓN.
- SI tiene la capacidad (calidad necesaria de asegurar esta posesión en estas situaciones al menos en un 60-70% de los casos (y consideramos suficiente este porcentaje para nuestro rendimiento colectivo), entonces el 30-40% de los balones perdidos, podríamos considerarlos en los análisis de juego, como error de EJECUCIÓN.
ANÁLISIS DE LOS ERRORES COMETIDOS EN UN PARTIDO
Obviamente creemos que los interrogantes expuestos en el esquema son los FUNDAMENTOS. El análisis del error cometido nos llevará a una situación de juego en la que se ha decidido de manera incorrecta, siendo el objetivo a mejorar en el entrenamiento el FUNDAMENTO que contempla esta situación y su CONSIGNA.
De esta manera, el análisis de las fases ofensivas y defensivas de cada una de las unidades de competición del partido, seguirá estos esquemas:
En la FASE OFENSIVA. Objetivo final: Realizar un remate.
En la FASE DEFENSIVA. Objetivo final: - Recuperar el balón, o - Evitar el remate eficaz del contrario.
FACTORES QUE IMPIDEN UNA TOMA DE DECISIONES CORRECTA
Concepto desarrollado en el apartado “Necesidad de la existencia de los Fundamentos del Juego Colectivo”.
CONTROL DEL PARTIDO EN UNIDADES DE COMPETICIÓN EN LA FASE OFENSIVA (DATOS ESTADÍSTICOS)
Concepto desarrollado en el apartado “Necesidad de la existencia de los Fundamentos del Juego Colectivo”.
NIVELES DE JUEGO
NIVEL-B de juego: Asociamos este nivel de juego al equipo que en su juego se observa:
- La manifestación de un juego en largo/profundidad/directo sin ningún tipo de control (cuando se puede jugar de forma controlada).
- La manifestación de un juego “amontonado” en una zona/demarcación del terreno de juego sin ocupar de forma estructurada los espacios de juego.
1. La manifestación de un JUEGO EN LARGO/PROFUNDIDAD directo sin ningún tipo de control.
Características de esta manifestación:
- No existen en la zona de recepción ni los jugadores ni la disposición adecuada para este estilo de juego.
- Incluso se juega en largo sin que el contrario realice una presión intensa sobre el poseedor (especialmente sobre la línea defensiva o el portero) que les obligue a realizar este lanzamiento sin ningún tipo de control.
- No se garantiza la posesión del balón.
- Destacamos tres aspectos:
- Con el juego en largo no podemos:
- Mejorar el porcentaje de éxitos de las unidades de competición.
- Garantizar la consecución del objetivo, ya que la oposición:
- Puede prever la situación de juego.
- Dispone de una manifiesta superioridad numérica.
- Puede entrenar una oposición eficaz.
- El desplazamiento directo –juego en largo- no era forzado ni necesario.
- Incluso si con el juego en corto no se consigue el objetivo, con este estilo podremos mejorar constantemente sin límite en el tiempo.
- Con el juego en largo no podemos:
Por contra en el estilo de juego en largo una vez sistematizados y concretados los lanzamientos y la dinámica de estrategia, y determinados los especialistas para cada una de las tareas, el entrenador ya no puede incidir en el aumento de la eficacia de su equipo.
A pesar de todo ello, deberemos utilizar el estilo de juego en largo/directo como recurso estratégico en los siguientes casos:
- Cuando el contrario, mediante una acción colectiva defensiva, elimina los espacios de juego de nuestra zona de inicio.
- Cuando el contrario elimina los espacios de juego únicamente de nuestra zona de progresión, es más aconsejable utilizar el estilo de juego de corto para largo.
2. La manifestación de un JUEGO “AMONTONADO” en una zona/demarcación del terreno de juego.
Esta manifestación provoca:
- Una ausencia extrema de espacios en la zona del poseedor.
- La imposibilidad de encontrar líneas de pase.
- La manifestación incorrecta de las situaciones 2:1 (aspecto necesario para superar al contrario en superioridad numérica).
- La imposibilidad de buscar otras soluciones mediante cambios de orientación, triangulaciones (no se ocupan todos los espacios disponibles)...
- Nivel de ejecución deficiente (acciones técnicas, manifestación de “miedo” al contacto, ...)
- Facilitar la acción defensiva del contrario al reducir/eliminar nuestro propio equipo los espacios de juego.
En prácticamente una “demarcación” de juego se acumulan 7 jugadores atacantes y sus correspondientes marcadores.
ASPECTOS BÁSICOS DEL JUEGO, PARA ACCEDER AL NIVEL -A- DE JUEGO
Además de los aspectos establecidos en los:
- Factores de eficacia básicos de la técnica
- Factores de eficacia básicos de la táctica
Deberemos trabajar para establecer la manifestación correcta de los Fundamentos universales PREVIOS
*ver en los apartados correspondientes
TÉCNICO, TÁCTICOS, JUEGO COLECTIVO, FÍSICOS, PSICOLÓGICOS.
Estos aspectos básicos son los que permiten que se den situaciones específicas del fútbol, ya que si un equipo, por ejemplo, no respeta conceptos como la amplitud o la profundidad se darán situaciones de aglomeración de jugadores que no deberían darse nunca en un partido de fútbol.
De esta manera cuando no se manifiesten estos aspectos básicos:
- No existirán unidades de competición en sentido estricto, ya que se manifestaran pérdidas constantes del balón por parte de ambos equipos, aspecto que imposibilita que cualquiera de ellos llegue a controlarlo mínimamente.
- No existirá ni control del balón ni control del juego.
Por tanto no iniciaremos el trabajo de mejora de los fundamentos Universales Básicos y/o por Demarcación, y del resto de los aspectos establecidos en el JUEGO COLECTIVO, mientras no exista una manifestación correcta de estos aspectos Previos del juego.
CONCEPTO DE OPORTUNIDAD "MOMENTO OPORTUNO"
“La oportunidad” se define como el momento preciso en el que la aplicación de la respuesta óptima/Consigna, permite resolver la situación de juego (siendo este aspecto la única manifestación de talento que necesita el jugador sin balón).
Este momento idóneo está condicionado por:
- La ubicación del balón (Situación de Juego).
- La ubicación del jugador en relación al balón (línea de pase).
- Que el juego esté orientado –o no- hacia la posición/demarcación del jugador sin balón.
- El momento en el cual el poseedor tenga la disponibilidad para jugar el balón.
- El hecho de que el jugador esté marcado o no.
- La ubicación del adversario (aspectos espacio/tiempo de la situación de juego).
El jugador debe aprender a detectar y a aprovechar este momento para:
- Aplicar la Consigna que permite resolver la situación de juego desde una perspectiva individual y/o colectiva.
- Por ejemplo: estando el balón en nuestra línea defensiva, y tras varios cambios de orientación entre nuestros defensores, detectar el momento oportuno (Oportunidad) para realizar un cambio de ritmo que nos permita enlazar con la fase de finalización con el mínimo número de toques posibles.
- Manifestar una respuesta de talento/improvisación diferente de la consigna.
Una vez que se domina el FUNDAMENTO se permitirá al jugador que, basándose en su talento y en su percepción de la oportunidad, manifieste una respuesta diferente a la definida en la CONSIGNA (siempre que resulte eficaz o que pueda llegar a serlo).
Esta circunstancia es la que da sentido a la idea de que las manifestaciones de talento deben estar situadas en un ámbito de juego ordenado y cohesionado del equipo.
Esta situación contrasta con aquellos jugadores que de manera continua e indiscriminada intentan afrontar situaciones de 1:1 – 1:2 – 1:3..., como único recurso para desarrollar su juego. Podríamos decir que en la mayoría de los casos no se trata de acciones talentosas de improvisación, sino de la constatación de que este jugador sólo dispone de este recurso.
Esta es la manera de posibilitar el desarrollo y la potenciación de los factores de improvisación y talento que hemos comentado anteriormente.
Vemos pues que el jugador no debe manifestar una acción improvisada porque sí, o porque no tiene ninguna otra opción, sino que la realizará después de:
- Reconocer la situación de juego y conocer cuál es la consigna adecuada.
- Determinar que se dan las circunstancias precisas (oportunidad del momento) para ejecutar una acción de talento / improvisación.
- Comparar ambas opciones.
INTELIGENCIA DEPORTIVA
Es la capacidad de un deportista para comprender y aprender rápidamente las acciones y evoluciones de un determinado deporte, que le permite reaccionar delante de una situación imprevista y “razonar” (decidir) la respuesta más eficaz.
TALENTO
Los jugadores, para tener opciones de llegar a un alto nivel deben manifestar, en el proceso de selección y durante el proceso formativo, las siguientes características:
- Motivación hacia la tarea.
- Nivel de activación óptimo.
- Concentración (Estilo atencional).
- Actitud (constancia, intensidad, afán de superación y esfuerzo, ...) manifestada en el desarrollo de la actividad (sean cuales sean las circunstancias de la misma).
- Decisión de querer ser jugador.
- Un alto nivel en algún factor de rendimiento.
- Los factores de rendimiento son aquellos que cuando son manifestados por un jugador permiten incrementar de forma objetiva el nivel de rendimiento del equipo.
- Nivel adecuado de talento.
Entendemos que existen dos tipos de talento:
- Talento “manifestacional”: Predisposición genética y/o desarrollada, inherente a las características del individuo, que le permiten manifestar de manera excepcional algunos de los aspectos o de las capacidades fundamentales para el fútbol.
- Talento de aprendizaje: Predisposición genética y/o desarrollada, inherente a les características del individuo, que le permiten asimilar, aprender y desarrollar con notable facilidad, los aspectos planteados en los entrenamientos y en la competición.
Así, el concepto de talento al que nos referimos es el manifestacional.
Este talento se manifiesta siempre por el jugador que actúa sobre el balón o en relación a él, ya que el resto de compañeros deben limitarse a realizar los movimientos y a mantener las posiciones propias del sistema de juego del equipo (siendo éstos invariables), para proporcionar el juego óptimo al poseedor.
En los jugadores sin balón es necesario un grado de talento en la manifestación de los aspectos de oportunidad a la hora de realizar (en el momento oportuno) los desplazamientos para salir de su zona de juego.
ESTAR O NO ESTAR EN LA ORIENTACIÓN DEL JUEGO/BALÓN
El jugador está en la orientación del juego/balón cuando puede participar/recibir el balón del poseedor de manera directa, o incidiendo directamente en el juego de un compañero sin balón, (dejándole un espacio libre).
El jugador no está en la orientación del juego/balón cuando se encuentra en la zona contraria o lejana a la disposición del juego del poseedor, hecho que no le permite participar en el juego directamente o de segunda jugada.
RITMO de JUEGO
Durante la fase ofensiva de cada Unidad de Competición aparecen dos ritmos de juego:
- En las sub-fases de inicio y progresión se manifiesta un ritmo controlado mediante un juego horizontal que permite organizar y buscar el momento adecuado para enlazar con las sub-fases de progresión/finalización.
- En las sub-fases de progresión/finalización se debe manifestar un ritmo rápido, mediante un juego vertical, que debe permitir vencer la superioridad numérica de la que dispone el adversario. En ambos casos se trata de evoluciones y desplazamientos constantes, rápidos y variables del balón (que no está nunca parado, y cambia constantemente de zona/demarcación), que no del jugador.
CAMBIOS DE RITMO EN EL JUEGO COLECTIVO
Se manifiestan durante la fase ofensiva de un equipo, cuando se alterna el juego de control en horizontal (cambios directos/indirectos de juego), con el juego de progresión en profundidad (relación entre líneas).
JUGAR A 2 TOQUES “TÁCTICOS”
La acción técnica del jugador que recibe el balón debe ajustarse a la situación de juego que se manifiesta en cada momento. La velocidad de ejecución del poseedor facilitará el control del juego/balón del equipo que lo posee, dificultando en gran manera la acción defensiva del equipo adversario.
Es aconsejable, por tanto, el juego del balón a 1 o 2 toques siempre que:
- El poseedor pueda hacerlo a nivel de ejecución.
- Los compañeros lo posibiliten.
En determinadas ocasiones el poseedor debe determinar el control del balón para:
- Realizar una conducción (si tiene espacio libre de progresión y no hay un apoyo óptimo en profundidad).
- El tiempo que utiliza en la conducción provoca una fijación/basculación de los adversarios hacia su zona, hecho que permitirá en segunda jugada la existencia de espacios libres en las zonas de otros compañeros.
- Realizar un regate en una situación de 1:1 (con espacio de salida) cuando el contrario no permite el pase. Esta acción provocará un claro desequilibrio colectivo en la acción defensiva del contrario, siempre que una vez realizado el regate realice el “segundo toque/jugada” con el balón.
- En estos casos el juego a dos toques técnicos vendrá condicionado por la posibilidad de intercalar estas dos acciones entre la recepción y el pase/centro/remate.
Por tanto hablaremos de 2 toques “tácticos” ya que consideramos el regate y la conducción como acciones, cuando son colectivamente correctas, que no distorsionan ni reducen la velocidad de ejecución pretendida.
De esta manera evitaremos provocar en los entrenamientos (con los dos toques técnicos), que jugadores que están solos, con espacio para la progresión, tengan que jugar a un compañero (incluso estando marcado) en lugar de progresar/fijar, aspecto que después manifestará en la competición:
Por ejemplo: el central, sólo, en vez de progresar y provocar que el defensor de un compañero lo fije a él y deje sólo al compañero (de manera que el pase del central será mucho más eficaz), hace el pase directamente a este compañero marcado, acción que puede provocar una posible pérdida del balón.
TIPOS DE “CONTROL” EN EL JUEGO COLECTIVO
Conceptos referentes al control que está ejerciendo un equipo mediante su juego.
En este apartado analizaremos el significado de tres conceptos diferentes que en muchas ocasiones se utilizan como sinónimos cuando no lo son, y que hacen referencia al control que un equipo ejerce colectivamente mediante su juego:
- Control del partido: Concepto que se manifiesta en la fase defensiva de las unidades de competición, de manera que no se ofrezcan opciones claras de control del balón, ni de finalización al equipo contrario.
- Control del balón: Concepto que se manifiesta durante la fase ofensiva de las unidades de competición, de manera que el equipo no pierda la posesión del balón hasta la acción previa al remate en la zona de finalización.
- Control del juego: Concepto que se refiere al dominio por parte del equipo de las fases ofensivas y defensivas de cada unidad de competición cometiendo el mínimo número de errores posibles en los aspectos descritos.
Estos conceptos tienen un componente genérico y global, diferenciándose de esta manera del concepto de la posesión del balón, que tiene un sentido estrictamente individual. Denominaremos en este sentido el “control” del balón como: RECEPCIÓN y PROTECCIÓN.
Los tres conceptos son especialmente importantes cuando hablamos del estilo de juego en corto, ya que en cualquiera de los otros dos estilos su importancia se ve reducida de manera considerable.
CONCEPTOS DE “RENDIMIENTO”
Es importante distinguir tres acepciones diferentes del concepto de rendimiento:
- Alto rendimiento deportivo: Fase de capacitación y preparación a largo y medio plazo para desarrollar al máximo las capacidades del jugador.
- Rendimiento: Etapa que pertenece a la Fase de Alto Rendimiento Deportivo en la que se pretende conseguir la máxima eficacia de las capacidades individuales de un jugador.
- Máximo rendimiento: Proceso en el que se pretende obtener a corto plazo la máxima eficacia/eficiencia de un equipo, con el único fin de superar al contrario en la competición.
VELOCIDAD DE EJECUCIÓN
Realizar la acción más adecuada, en cada Situación de Juego, de forma precisa con la velocidad óptima (en la mayoría de los casos se tratará de ejecutarla en el menor tiempo posible) con el menor número de acciones posible, y con menor nº de contactos posible.
OSCURECER
Es la acción táctica a realizar cuando recibimos un marcaje individual del contrario, de forma que éste no pueda ver a la vez a nosotros y al balón, antes de recibirlo.
- Habitualmente esta acción la realizaremos poniéndonos a la espalda del contrario, aunque en ocasiones la simple ubicación zonal nos permite este objetivo.
- Realizaremos esta acción, cuando nos encontremos en la orientación del juego y antes de recibir o ir a buscar el balón. De tal forma, que nunca nos podremos mantener estáticos mientras el balón está en juego.
LÍNEA DE PASE
Se trata de conseguir con un desplazamiento, manteniendo constantemente la amplitud y la profundidad, la manifestación de un “pasillo” libre de contrarios, entre el compañero poseedor y nosotros, de forma que podamos recibir el balón sin peligro de ser interceptado por ningún contrario.
- Habitualmente la línea de pase la conseguiremos simplemente colocándonos de forma correcta, cuando nos encontremos en la orientación del juego, en el supuesto de que el contrario realice un marcaje zonal.
- En el caso de recibir un marcaje individual, la línea de pase la conseguiremos después de realizar un “oscurecimiento” a nuestro marcador, en el supuesto de que este se quede fijando al balón.
APOYO DE EMERGENCIA /JUGAR EN SEGURIDAD
Un compañero de la línea anterior realiza un apoyo de emergencia:
De forma que para apoyar al compañero poseedor, se situará por detrás, desmarcado y en “diagonal”, para ofrecerse a recibir un pase de “seguridad”.
- Si recibe el balón deberá jugarlo hacia la zona/carril contrario de donde procedía.
Cuando el poseedor no tiene posibilidades de progresar, jugar en profundidad o realizar un cambio de orientación.
Podrá/deberá realizar un pase al compañero libre de marca que nos apoya retrasado con el fin de garantizar la posesión del balón y que éste pueda reorientar el juego.
OPOSICIÓN PASIVA-ACTIVA-REAL
En las tareas donde se establece un grupo defensivo que ejerce de oposición, con el fin de trabajar un objetivo ofensivo específico con el grupo de “trabajo”, podremos condicionar esta oposición de forma individual o colectica, que facilite la manifestación del objetivo del equipo de trabajo y que a la vez se pueda condicionar esta oposición de forma progresiva
- Oposición pasiva: el defensor y/o equipo realizara un seguimiento de su marca/balón, sin interrumpir la evolución del balón ni molestará al jugador, es decir realizará una oposición “sombra” que permita al atacante (con o sin balón) reconocer su presencia pero sin estar condicionado por él.
- Oposición activa: en este caso el marcaje ya real en relación al atacante (con o sin balón) –marca – presión – carga legal… -pero en ningún caso intervendrá con el balón. Es decir aunque pueda interceptarlo – robarlo… no ejecutará la acción sobre el balón.
- Oposición real: ahora ya la oposición será real en todas sus manifestaciones
LÍNEA DE INTERCEPTACIÓN
Entendemos como línea de interceptación la existente entre el balón y el adversario atacante que está en nuestra zona con opciones de recibir. El defensor no debe marcar al jugador, ni eliminar los espacios del poseedor, sino que su misión es “cortar” la línea de pase sin salir de su zona de juego.
De esta manera, y sin necesidad de salir de la propia zona defensiva, los jugadores pueden evitar que el contrario se encuentre en situación de recibir el balón, posicionándose de manera que puedan “cortar” la línea de pase.
De este modo no será necesario ni un marcaje intenso sobre el contrario, ni una acumulación de jugadores en la zona del balón.
Denominamos a estas variantes y formas defensivas “MARCAJE INTELIGENTE”.
En consecuencia con lo comentado en este punto, entendemos que únicamente podremos conseguir el éxito defensivo (evitar la finalización del contrario/recuperar el balón), si aprovechamos sus errores ofensivos.
LA DISPOSICIÓN OFENSIVA
Consideramos la acción de la Disposición Ofensiva (DO) como aquella que se realiza a partir de un lugar (habitualmente en el medio campo –para evitar el fuera de juego-) o en unas posiciones determinadas por uno o varios jugadores definidos, que dejan de realizar el marcaje (dejando de participar directamente en el juego defensivo de nuestro equipo), quedando en disposición de apoyar/participar en el inicio de las acciones ofensivas (un ataque rápido, un contraataque o apoyar al recuperador para garantizar la no pérdida del balón) al recuperar el balón en juego, y/o de realizar una determinada Vigilancia Defensiva).
Es evidente que la Disposición Ofensiva que establezcamos modificará nuestro juego, no solamente en el ámbito defensivo si no también, y especialmente, en el ofensivo.
La DO también condicionara la estructura defensiva de la oposición ya que probablemente mantendrá superioridad numérica en su línea defensiva en relación a nuestros jugadores en DO
LOS MOVIMIENTOS DEL SISTEMA
Concretado el Sistema de juego, y si nos basamos en el Estilo de Juego en Corto/ asociativo (aun contemplando la utilización del estilo de juego directo, o de corto para largo en los casos necesarios), podremos establecer los MOVIMIENTOS DEL SISTEMA DE JUEGO (MSJ).
Podemos decir que los MSJ son aquellas ubicaciones, posiciones y/o desplazamientos de todos los jugadores en cada una de las Situaciones de Juego que se manifiestan en ataque y en defensa, con el objetivo de que:
- En ataque el poseedor disponga de los apoyos necesarios apareciendo en el espacio que permitan garantizar la no pérdida de balón, la progresión y una eficaz finalización.
- En defensa, se consiga la recuperación del balón lo antes posible, aprovechando los errores que cometa el contrario (de manera individual o colectiva).
Recordamos que los aspectos que los jugadores/equipo han de dominar para realizar un juego lógico y coherente, en la aplicación del estilo de juego en corto asociativo, son los FUNDAMENTOS UNIVERSALES (previos, básicos, y por demarcación).
Mientras no sea así, en un equipo de máximo rendimiento (resultados inmediatos), el entrenador podrá diseñar estos movimientos del sistema (incluyéndolos en la “hoja de ruta”) como RECURSO para mejorar el rendimiento del equipo (en el supuesto de querer utilizar como base de su juego el estilo de juego posicional/asociativo).